El pasado jueves, en el Hotel Muga de Beloso de Pamplona, la asociación Co.CiudadaNA organizó un encuentro con Blanca Hernández Oliver, Delegada del Gobierno España para la Violencia de Género. Bajo su mandato, la Delegación del Gobierno de España para la Violencia de Género ha promovido numerosas actuaciones. Cabe destacar la aprobación de la Estrategia Nacional para la erradicación de la violencia contra la mujer 2013-2016; la campaña de concienciación “Hay salida para la violencia de género”; la creación de una red de empresas por una sociedad libre de violencia de género y los boletines estadísticos sobre la violencia de género, entre otros
Blanca Hernández Oliver, es Letrada de la Cortes Generales. Licenciada en Derecho y Especialista en Derecho Público. Ponente en materias de derecho público, derecho parlamentario, ética pública y cooperación internacional al desarrollo en materia parlamentaria. Ha publicado numerosos artículos sobre Derecho Público y, en el ámbito de la violencia de género, relacionados con la trata de mujeres con fines de explotación sexual. Ha estudiado en Alemania, en la Facultad de Derecho de la Unversidad Karls Eberhard de Tubinga y fue seleccionada para realizar el International Visitor Leadership Program del Departamento de Estado de los Estados Unidos de América en el año 2006.
Antes de iniciar la ponencia, Eugenio Arraiza, Presidente de Co.CiudadaNa, presentó la jornada dado importancia al deber cívico de erradicar este fenómeno social.
Por su parte, Margarita Pérez Salazar presentó a la ponente destacando que la violencia de género tiene un fuerte componente social; incluso cultural. Es un problema de índole social que afecta a un importante número de mujeres. Incidió en que aquellas personas que son objeto de esta violencia desarrollan un comportamiento de víctimas muy especial dado que, en la mayoría de los casos, el agresor es persona muy próxima, de su entorno más íntimo. También expuso que no hace falta denuncia para intervenir en el hecho violento. Por último, mencionó en el ámbito navarro la ley Foral 14/2015, de 10 de abril, para actuar contra la violencia hacia las mujeres
Al inicio de su ponencia, Blanca Hernández quiso situar el marco de su labor profesional en el compromiso personal. “Cada vez que te acercas a esa realidad, a esas víctimas, te duele más.” Resaltó la ablación como práctica atávica cultural que dado el hecho migratorio también afecta a España. Describió el crimen organizado que se aprovecha de la vulnerabilidad de las mujeres en el tráfico sexual.
Una de las primeras ideas que quiso trasladar es que una de las palancas precisas para acometer el problema es el conocimiento del mismo. De ahí, la construcción de la macro-encuesta a más de 10.000 mujeres residentes en España que realiza el Centro de Investigaciones Sociológicas para la Delegación. Cuyo principal objetivo es conocer el porcentaje de mujeres residentes en España de 16 y más años que han sufrido o sufren algún tipo de violencia por ser mujeres. Siguiendo las recomendaciones internacionales no se pregunta a las mujeres directamente si se sienten maltratadas sino que se les pregunta por actos concretos y muy bien definidos de cinco tipos de violencia: Física, Sexual, Psicológica de control, Psicológica emocional y Económica.
A los resultados de la última encuesta se puede acceder en: http://www.msssi.gob.es/gabinetePrensa/notaPrensa/pdf/30.03300315160154508.pdf
La ponente parte de la consideración que el concurso internacional para evitar esta realidad es importante. El Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica del 2011 supuso un hito. En el caso español, citó la Ley 27/2003, de 31 de julio, reguladora de la Orden de protección de las víctimas de la violencia doméstica y la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Genero.
España está muy avanzada en políticas públicas sobre violencia de género. Entre otras cosas porque la ha convertido en política de Estado, más allá del gobierno de turno. “Nuestro país está muy comprometido; siendo exportadas nuestras prácticas públicas a otros países de Europa. Una de las claves del éxito de estas políticas es darle notoriedad a la hora de abordar el problema, rompiendo el silencio”
Destacó que en esa ruptura del silencio, las asociaciones civiles han sido clave. Como peligro tendencial explicó que las nuevas tecnologías de comunicación, las redes sociales, permiten un mayor control y acoso por parte del agresor.
Por último, cinco retos significativos a acometer.
1.-Detección temprana. Siendo capaces de identificar las formas más sutiles de violencia por ser éstas las primeras y más difíciles de detectar.
2.-Romper el silencio en el entorno social y familiar donde se produce esta violencia.
3.-Acometer el fenómeno en la juventud donde la mercantilización del cuerpo por parte de la sociedad de consumo es algo hiriente.
4.-Aproximarnos a los grupos más vulnerables: personas con discapacidad, inmigrantes…
5.-Responsabilidad Social de los medios de comunicación al relatar los casos de violencia.
Finalmente, al término de la exposición se produjo un rico y motivador debate con significativas aportaciones